miércoles, 31 de diciembre de 2014

Navidad, navidad.


Fuente: Lightstock

¿Cómo se ve la navidad? Como tú y yo haciendo cuentos, muertos del frío.
¿Cómo sabe la navidad? Sin pensarlo: a pastelón de plátano maduro :)
¿Cómo se oye la navidad? Con los oídos del corazón.
¿Cómo se siente la navidad?  Como el eterno abrazo que se espera.

La navidad trae recuerdos de familias rotas, familiares o amigos que perdimos y anhelos no alcanzados. Es esta idea de una  época perfecta  la que nos hace recordar que no somos perfectos ni nuestra vida tampoco. Dios no niega esta realidad. La navidad= nacimiento de Jesús. Dios intervino, eso no cambia la imperfección pero si garantiza un día mejor, un mundo mejor.  La esperanza de un cielo nuevo y una tierra nueva para todo el que decide seguir los pasos de Jesús, que no se quedo niño sino que creció y murió por ti y por mí.

Este tiempo no tiene porque tratarse de crear los recuerdos perfectos pero de recordar perfectamente lo que Dios hizo. Dios entro a nuestra historia y la partió en dos. Agarrémonos de esto tanto en distracción de la abundancia como en la confusión que puede traer la escasez.

Sea cual sea tu situación, sea la de un humilde pastor o un glamuroso rey mago, déjate guiar por la estrella que apunta al pesebre.

XOXO
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