Y más que
nada creo en el poder de la palabra de Dios. Nuestro Dios es un Dios que habla.
El creo que lo que vemos con su palabra, hablo y todo surgió (Gen.1). Y nos
dio vida nueva a través de su palabra (1 Pedro 1:23).
Y estas 3
palabras fueron las que cambiaron mi mundo:
Dios. Me.
Ama.
¡Dios me
ama! ¡A mi, a Leticia! Completa e incondicionalmente.
Y por eso
todo esta bien, hoy y mañana.
¿Puedes tu sentir
lo espectacular de estas palabras?
Que bellas son, que bellas son!
Bellas palabras de vida.
-Dice el viejo himno
No hay comentarios:
Publicar un comentario