viernes, 17 de febrero de 2012

¿Quien o que soy?


La sagrada escritura dice en 1 de Juan 3:1 NVI
¡Fíjense qué gran amor nos ha dado el Padre, que se nos llame hijos de Dios! ¡Y lo somos! El mundo no nos conoce, precisamente porque no lo conoció a él.
Y no fui yo que puse esos signos de exclamación ahí. Juan esta maravillado de esta realidad. Considero que una de las mayores bendiciones de ser creyentes es precisamente el regalo de una identidad.
A lo largo de nuestra vida la gente nos estará dando identidad, aunque yo diría que mas bien son etiquetas:
¨Eres un buen estudiante¨
¨Eres un tiguere¨
¨Eres chistoso¨
¨Eres la chica del cabello hermoso¨ o ¨el chico de la nariz grande¨
Sin embargo, esto no es suficiente. No es la última verdad. Constantemente estamos ahí esperando que la gente nos diga que somos, tener identidad es una necesidad, y la buscamos como locos. Esto no es solo cuestión de adolescentes es algo que todos hacemos.
Ni la sociedad, ni tus padres, ni tu novio, ni tú misma determinan lo que eres esencialmente, Dios, que es la Verdad, determina lo que eres.¨ Entonces regresemos a la biblia, según ella somos criaturas. Esto nos eleva porque significa que no somos un accidente, que formamos parte de un ¨diseño inteligente¨, pero al mismo tiempo nos humilla porque eso también quiere decir que no nos creamos a nosotros mismos que dependemos de alguien más.
Ahora bien, la biblia dice por otro lado:
Mas a cuantos lo recibieron, a los que creen en su nombre, les dio el derecho de ser hijos de Dios. Éstos no nacen de la sangre, ni por deseos naturales, ni por voluntad humana, sino que nacen de Dios. Juan 1:12-13 NVI
Es decir, los creyentes somos criaturas hechas hijos! Esa es nuestra identidad. Nadie nos la puede arrebatar y ningún agente que no sea Dios es capaz de darnos eso.

No hay comentarios:

Publicar un comentario

Licencia de Creative Commons
Este obra está bajo una licencia de Creative Commons Reconocimiento-NoComercial-SinObraDerivada 3.0 Unported.